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sábado, 14 de noviembre de 2015

3era Temporada del Desafío Venezolano “Sobreviviendo a la Inseguridad”



                Que difícil es sobrevivir a los retos de la vida primero fue “La Escapadita (http://camioneticas.blogspot.com/2015/10/1era-temporada-de-sobreviviente-la.html )  Por di fuera poco quedamos arruinados con el daño del carro en Rápido y Furioso No… Lento y Arrechísimo” ( http://camioneticas.blogspot.com/2015/10/2da-temporada-de-sobreviviente-rapido-y.html ) Ahora cono volver a la normalidad ante los ataque de la inseguridad

Primer Reto “Poner una Denuncia por Hurto”

                Si has sido víctima del Hampa, probablemente has vivido el reto de tratar de poner una denuncia ante las autoridades respectivas

                Después de sortear los escollos del transito, llegamos a casa de mi amiga, ella va de primero y más atrás, yo con algunas compras, al entrar a la casa, de inmediato me dice: “Amor y el Televisor?”, miro al sitio donde debía estar y no veo nada, entro a uno de los cuartos y veo las gavetas de la peinadora y mesitas de noche por el piso, noto también la ausencia del otro televisor.

                La desesperación aumenta y la sensación de haber sido vulnerados es indescriptible, voy al cuarto de la niña y veo que forzaron la rejas, rompiendo las barras, siendo este, el punto por el que ingresaron, mi amiga, empieza a llorar, le invade una sensación de impotencia y empieza a gritar groserías por la ventana por donde entraron, a manera de desahogo, no queda de otra.

                Empezamos a revisar sin tocar nada pues el desorden realizado fue tanto, que pensamos que los ladrones han debido dejar sus huellas por todos lados, hace un pequeño inventario de lo que falta, mientras los vecino ya enterados de la situación empiezan a acercarse, unos por curiosidad, otros indicando que debíamos hacer, etc.

                Entre tanto intento llamar al “Patrullaje Inteligente”, nada que cae el recién estrenado numero gringo, imperialista “911”, llamo al antiguo “171”, nada, varios vecino intentaron hacer lo mismo, pero le salían ocupado o los ponían a esperar hasta que la llamada se caía sola, marque a Polizamora y me cayo pero al atenderme, estos se lavaron las manos y me dijeron que debía ir al CICPC a poner la denuncia, les pedí indicaciones de cómo llegar, con fastidio me indicaron algo y enseguida sin poder preguntar otra cosa me colgaron.

                Mi amiga me hace un resumen de lo que se observa que falta y me dice los 2 Televisores, el Wii de la Niña, Un Blue Ray recién estrenado (y teníamos 2 películas por ver), la Ropa que le compro a su hija para estrenar en Diciembre y como 5 paquetes de toallitas húmedas de la bebe.

                Con un vecino, me fui hasta los Naranjos en Guarenas, al CICPC para poner la denuncia, al llegar me pelotearon de un funcionario a otro, echando el cuento una y otra vez, una replico algo así como “Unos Televisores” (en tono de: “por esa pendejada vienes para acá”).

                Al fin entra un funcionario y me indica que lo siga, llegamos hasta una oficina donde tenían esposado a un muchacho en una silla, me dice que me siente, mientras en la computadora empieza a buscar el formato respectivo de la denuncia, y me hace como 15 preguntas, a parte de los datos personales y de dirección, imprime como 5 copias las firmo todas y pongo mis huellas en cada una.

                Vamos hasta la recepción, busca un sello, archiva en diferentes bandejas, me da una copia y me dice “Esta Listo”, yo me quedo como paralizado y pregunto: “Eso es Todo?, Yo no he tocado nada?”, tal vez imaginándome una escena tipo CSI- Las Vegas, a lo que la señora me dijo, “Si eso es todo, nosotros pasamos luego para tomar las muestras, puede arreglar su casa”

                Pase en la sede del CICPC como 3 horas, llegue a la casa y seguía la consternación por lo sucedido, no toque nada esperando la comisión que iba a averiguar, espere esa noche y la siguiente noche y la siguiente a esa,  hasta hoy sigo esperando y nada, al único que le tomaron la huellas y paso 3 horas en la comisaria fui yo.

                Lo mas cumbre es que al día siguiente robaron otro apartamento en otro edificio y la semana siguiente 2 apartamentos mas y hasta el sol de hoy seguimos esperando.

Segundo Reto ·”Tratar de Volver a la Normalidad”

                Esto de sentir que irrespetan tu espacio es algo que causa traumas, te deja vulnerable, pero debes intentar retornar a la normalidad, ese reto es muy difícil, no me quiero imaginar cómo se sentirá la gente que es agredida o secuestrada mientras las roban.

                Con el desorden y la esperanza que la comisión llegara, saque un colchón de un cuarto a la sala y el de la cuna de la niña y allí nos acostamos, pero nadie pudo dormir, cada movimiento o ruido era un sobresalto para mi amiga.

                La niña en su inocencia me dijo: “No se preocupen, ahora hay espacio para poner el arbolito y pedirle al niño Jesús que nos traiga un Televisor”, la abrace y la bese, luego me pidió un lápiz y un papel y empezó a realizar letras, le pregunte qué estaba haciendo y me dijo: carteles que decían no robar, para que los hombres malos no entren. No pude evitar soltar una lágrima.

Como explicarle que las cosas no son tan fáciles, que ni los aguinaldos alcanzaran para comprar un solo televisor pequeño, que el niño Jesus tendrá que hacer milagros para traerle algún juguete

                Así pasaron varios días, durmiendo en la, sala y la niña no ha querido entrar a su cuarto (hay que recordar que por su ventana entraron), solo dice que o quiere dormir allí porque hay fantasmas y entran los hombres malo que le quitaron su ropa, su Wii y su televisor.
               
Tercer Reto “Reforzar la Casa”

                Otra de las cosas que buscamos, luego de ser vulnerados es aumentar los niveles de seguridad, por lo que le pedí a un amigo herrero que me ayudar a reforzar todas las rejas, por cierto casi fiado porque con los gastos del carro, Con que se sienta la cucaracha?

El vecino me indico donde comprar las Pletinas y me dirigí con mi amigo al lugar, al llegar no había. Al encontrar un sitio que tuviera, pido 6 pletinas, que según mi cuenta necesitaríamos para reforzar todas las rejas. Pero que sorpresa me lleve, el vendedor me indica que solo venden 2 laminas por persona, que no aceptan efectivo y que cada quien debe pagar su lamina, yo no puedo pagar la de mi amigo y debía esperar un mes para la siguiente compra.

                Ante tal situación, salgo a buscar a otra amiga en Nueva Casarapa, está a su vez la hace transferencia a mi amigo y cada uno de nosotros compra 2 laminas que el racionamiento permite.

                Que increíble racionamiento hasta para reforzar tu casa

                A pesar de estar reforzada la casa, haber pasado un tiempo mi amiga sigue aun con la angustia de salir y dejar sola la casa, la niña sin querer entrar a su cuarto y en cuanto a mi llego el cierre de esta etapa cuando mi amiga me pidió un tiempo, yo creo que me paso como el cuento aquel y pensó que yo le traía mala suerte, pues, estuve cuando se me daño el carro, estuve con las colas arriba y abajo con ella, estuviste cuando tuvo que gastar todo su patrimonio, estuve cuando la robaron.

                Así termina mi aventura por aquellos lares, lo que extrañare es la cola en el carrito, espero que ella algún día se recupere del todo, por otro lado, siempre hay que buscar el lado positivo, pues en su casa sin televisor y con la escases de preservativos y anticonceptivos, la cosa podía ser peligrosa…


                Ahora solo me queda, andar a pie y sobrevivir al reto de la despedida

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